Muchas construcciones de estilo agreste se suelen construir con materiales naturales obtenidos de la misma zona donde se construye la vivienda. Piedras irregulares de distinto tipo y tamaño pasan ser parte de muros externos y de las paredes internas de la propiedad. Los pisos tienen lajas planas en todos los ambientes y los maderos de troncos con su corteza son puntales que sustentan los techos con coberturas de tejas artesanales de barro cocido o de pizarras.
Algunas construcciones tienen techos de maderas con manojos de juncos, cañas, pastos o ramas que amarrados de forma abigarrada impiden el paso del agua de las lluvias. Estos estilos de construcción con materiales naturales son muy vistosos y alegres por sus características y su multiplicidad de colores.
Hay construcciones que se realizan con las formas que identifican a las series de dibujos animados de “Los Picapiedras” con muros irregulares, ventanas y puertas de formas atípicas y agrestes. Este estilo de vivienda mantiene el estilo tanto en el aspecto exterior como en los ambientes interiores donde los muebles también tienen construcciones de maderas de troncos irregulares sin pulir.
Los fregaderos, bañeras y otros artefactos también están realizados en materiales naturales para mantener el estilo decorativo del todo el conjunto. Hay viviendas agrestes donde también se respeta el estilo con la vajilla donde las ollas, platos y fuentes están realizados en barro cocido y en color rojo natural o en cobre. Los cucharones son de mango largo también realizados en cobre martillado con asas de madera natural.