Los primeros pictogramas señalan claramente que en la prehistoria el hombre primitivo clasificaba de manera no consiente las formas geométricas de las vasijas y de los utensilios precarios. De manera informal y de forma intuitiva la geometría empezó a estar presente y desde ese mismo instante hasta el presente las formas geométricas participan de forma activa en cualquier elemento. Estrabón, Heródoto y Diodoro sostenían que la geometría fue inventada o descubierta por los egipcios y que esos conocimientos básicos fueron enseñados a los griegos. Las fórmulas para calcular superficies, volúmenes, áreas o longitudes fueron evolucionando con el tiempo pero la base de esos conocimientos está intacta a pesar de los siglos pasados.
La palabra “geometría” significa medir la tierra o medición de la tierra y el objetivo era medir las parcelas de tierra de forma exacta. La cultura griega a través de Euclides, Tales de Mileto y Pitágoras adoptaron y mejoraron los conocimientos egipcios de cómo medir los volúmenes geométricos de forma perfecta.
En Egipto los sacerdotes y los escribas eran los poseedores de los diagramas geométricos y los únicos que las utilizaban como una forma de poder y de dominio de una ciencia valorada.
En la edad media los árabes y los hindúes hicieron su aporte a la geometría, la aritmética y las matemáticas agregándoles la trigonometría y el álgebra. La geometría proyectiva llega con el renacimiento donde Leonardo Da Vinci y Alberto Durero hacen un importante aporte. La geometría analítica de la edad moderna llega de la mano de René Descartes que remplaza a la regla y el compás por coordenadas cartesianas.