Las decoraciones fijas son las que están realizadas en los muros de forma permanente y que no pueden ser removidas. Hay paredes que tienen nichos profundos donde se colocan jarrones o artesanías con luces direccionales y otras que están realizadas con ladrillos de vidrio con distintos grados de trasparencia que permiten pasar la luz de un sector a otro.
Las paredes de ladrillos vidrio pueden ser construidas en sectores pequeños o en grandes espacios según el criterio del arquitecto o diseñador. La variedad de colores y texturas de los ladrillos de vidrio permiten encontrar el adecuado a cada estilo de decoración.
Hay decoraciones fijas en los baños donde los ladrillos de vidrio ofician de mamparas divisorias de bañeras, el los livings donde se pueden construir vistosos bares, en las cocinas donde los ladrillos de vidrio pueden ser el sustento de las mesas de desayuno y en los dormitorios donde los grandes espacios pueden ser divididos por este tipo de decoración fija que ilumina y a la vez hacen su aporte de estética.