Uno de los grandes problemas del presente es la gran cantidad de chatarra electrónica que se acumula y el difícil tratamiento de los materiales para poder reciclarlos por la cantidad de componentes de distintas características. Lo más fácil de reciclar de la chatarra electrónica son los gabinetes plásticos de las computadoras de escritorio y lo más difícil los aparatos de telefonía celular por lo compacto de todos sus componentes.
Las baterías de los teléfonos celulares son los elementos más peligrosos y contaminantes, algunas baterías suelen estallar al ser manipuladas y contaminan millones de litros de agua antes de quedar inocuas. Recuperar los contactos metálicos utilizados como conectores es una tarea manual muy difícil y costosa de ejecutar. En la actualidad no existe la posibilidad de fundir y separar los plásticos, la bakelita y los metales utilizados en los teléfonos celulares y en los componentes de las computadoras.
Otro de los principales inconvenientes de la basura o chatarra electrónica es la velocidad con que los artefactos dejan de tener vigencia para ser reemplazados por otros más modernos con nueva tecnología y más adelantos. Es tan grande el avance de las nuevas tecnologías electrónicas que en uno o dos años los aparatos dejan de ser actuales y son desechados para reemplazarlos por los de última generación. Las computadoras, los teléfonos celulares y las impresoras son los artefactos modernos que más velozmente dejan de tener vigencia y las actualizaciones se producen a cada instante generando más cantidad de elementos desechables y difíciles de reciclar.